Aquells episodis en que tothom parlava del temps que feia.





dimecres, 24 d’agost del 2011

El hivern 1890-91. El més fred.

Aquest hivern va començar de forma sobtada a finals de Novembre quan una depressió mediterrània envia un front de pluges el dia 27, obrint el pas a una onada de fred d’origen continental. No va nevar a Barcelona però s’arriba a -4,7ºC el dia 29, temperatura que encara és el registre més baix mesurat a un mes de Novembre a Barcelona.


El fred va ser tan intens com curt. Desembre comença amb temperatures molt més suaus i pluges: "El tiempo continua metido en aguas: á las lluvias del lunes siguieron tres ó cuatro fuertes rociadas ayer tarde y noche que dejaron al pavimento de nuestras calles y paseos en lamentable estado.
En las del Ensanche formáronse los extensos charchos de lodo de costumbre, en el arroyo, mientras en las aceras lo falso del afirmado hacía difícil el tránsito, sin hundirse hasta los tobillos: la Rambla convirtióse en cenagoso Skating-ring, en competencia con las placas metálicas que cubren las bocas de las cloacas en algunas calles y que por el uso se han vuelto resbaladizas en estremo.
El tiempo continua cubierto, amenazando nuevas lluvias aunque sin que el frio se deje sentir como en días anteriores."
LV. 10-12-1890.


Va ser un miratge doncs el dia 12, després del episodi de pluges que narra el cronista, l’ambient plenament hivernal torna ser protagonista durant una setmana. Llegint les cròniques periodístiques d'aquells dies podem copsar una mica el dia a dia barceloní en les dates prèvies al Nadal: "El día se deslizó ayer frío y en estremo variable, luciendo á ratos un sol agradable que templaba la fría brisa que se dejaba sentir y quedando velado durante otros, en especial por la tarde, por densos vapores que sin cesar cruzaban el horizonte.
Las aguas del puerto, permanecieron tranquilas aunque altas, y las de la rada avanzaron algo su turbulencia del día anterior.
Los paseos se vieron con la animación de costumbre: pero la gente se refugió con preferencia en cafés, círculos y teatros cuya temperatura era más agradable que la de la calle."
LV. 15-12-1890.


Cal ressenyar que les temperatures aquests dies no passaven dels 8 ó 9 graus i les mínimes baixaven fins a 2 ó 3 sota zero a la mateixa Barcelona. Tres dies més tard llegim a La Vanguardia: "Ayer, como el día anterior, se presentó el tiempo hermoso luciendo el sol en todo su esplendor templando con sus benéficos rayos la crudeza del frio propio de la estación.
Durante la mañana y primeras horas de la tarde, los Paseos de Gracia y Colón se ven en extremo concurridos por grandes y chicos que van á tomar cómodamente el sol, el gran vivificador de la naturaleza.
Al anochecer, la calle de Fernando continua siendo el paseo predilecto en el invierno á aquella hora, de una gran multitud de desocupados y curiosos que acuden cada uno según sus aficiones, los unos á admirar la riqueza y buen gusto de los aparadores de las lujosas tiendas situadas en aquella vía; los otros —y no son pocos— á contemplar la obra de la naturaleza que se exhibe en forma de bellas y elegantes mugeres, encanto de la ciudad."
LV. 18-12-1890.

Un nou episodi plujós, no gaire important, permet la celebració de la festivitat de Sant Tomàs, el 21 de Desembre, del qual La Vanguardia ens fa una glosa, cliqueu aquí i llegiu al final de la tercera columna en l'article " El día de ayer". Els dies de Nadal tornen les mínimes sota zero seguides d'un temporal de llevant pels Sants Innocents que provoca danys en algunes platges del Maresme, Arenys i Sant Pol especialment.


A finals de l’any torna la bonança que dura fins el dia de Reis: "A los dos días de espléndido sol y temperatura apacible que nos dispensó la naturaleza, ha sucedido un día lluvioso y frio en estremo, á lo cual ayuda un airecillo Norte que hace chupar los dedos y no de gusto." LV. 07-01-1891. És aquella mateixa matinada del 6 al 7 de Gener, quan es desferma una violenta tempesta amb calamarsa i un descens acusat de la temperatura que deixa les muntanyes de la serralada Litoral ben blanques. La onada de fred posterior fa exclamar al periodista de La Vanguardia, que el dia 9 de Gener ens descriu una Barcelona gèlida com poques vegades passa: "Día crudo si lo hay en el por lo común templado clima de Barcelona fue el día de ayer.
La noche anterior como consignamos ayer había sido fría, pero la madrugada nada tuvo que envidiar á las mas frías de las zonas glaciales.
No se crea que exageramos: al retirarnos la madrugada anterior de la redacción el agua depositada en los mil charcos con que la incuria municipal y el mal estado de los empedrados adornan las calles de la ciudad, estaban completamente helados.
Las inmediaciones da las fuentes públicas que como es sabido están todas rodeadas de inmenso lodazal, los paraderos da los tranvías, las charcas procedentes de las últimas lluvias, todo estaba completamente helado.
Los surtidores situados en las plazas públicas presentaban enormes carámbanos de hielo, y en la taza de los mismos se veían grandes pedazos de lo mismo.
Con estos antecedentes amaneció el día: día espléndido, claro, despejado, con sol brillante pero sazonado de un vientecillo frío que cortaba el rostro como una navaja.
La gente que transitaba por calles y paseos iba aprisa, tapada hasta los ojos y con las manos en los bolsillos respectivos, como si en ellos llevaran un tesoro.
Caras bonitas ayer no las hubo en la ciudad porque las que salieron á la calle desaparecían bajo velos, pañuelos y bufandas, que eran la desesperación de tanto pirata callejero que va en busca —en verano y en invierno— de estos rostros divinos que son el encanto de la capital.
Al anochecer continuaba el vientecillo frío, las charcas continuaban heladas y en algunos sitios, como en las fuentes de las plazas de Medinaceli y Palacio el agua de los surtidores ai salpicar los macizos inmediatos convertíase en carámbanos de hielo que las daba un aspecto como si hubiera nevado sobre ellos.
La noche continuó fría, con un frio seco que helaba las palabras en la boca.
La Rambla estaba desierta y tan solo la cruzaban los que tenían imprescindible necesidad de ello, viniendo de los cafés y teatros —que se vieron muy poco concurridos— tan solo algún impertérrito Ramblista, les gorriones en los árboles y los trincheraires, esos otros gorriones de ciudades, acurrucados en los rincones trasmitiéndose unos á otros el escaso calor que irradiaban sus cuerpos."
LV. 09-01-1891.

Mapa isobàric i situació de les temperatures a 850 hPa (uns 1500 metres d'alçada) el dia 9 de Gener, quan es va escriure la crònica anterior.

Eren els efectes d'una primera onada de fred. El 10 de Gener la mínima va ser de -4,1ºC i ja hi havia consciència de que el fred experimentat feia temps que no es vivia. Potser pensaven que seria cosa de dos dies però això només va ser el principi: "La temperatura que reinó durante el día de ayer fué, sin dejar de ser crudísima, más bonancible que la del anterior. Los hoyos al pie de los árboles de muchos paseos, los charcos de las fuentes y los pilones de algunos surtidores, conservaron el hielo hasta muy avanzado el día, y hasta en algunos no se derritió del todo.
El viento norte cedió algo y la noche no fue tan fría como la última. No obstante la desanimación en calles y sitios de recreo fue notable.
Según algunas personas que pueden saberlo hace más de veinte años no se había experimentado en Barcelona un frío igual al que ha reinado estos días."
LV. 10-01-1891.

Respecte a la darrera afirmació del periodista, que posa en evidència que el sensacionalisme no és moda de la nostra època si no que és inherent als humans, només feia dos mesos que la temperatura encara va ser més baixa que aquest dia de Gener, com s'indica al principi d'aquest article, i si mirem altres hiverns només feia 3 anys, al Gener de 1887, que la temperatura va baixar fins a -5,8ºC. La memòria meteorològica sempre és dolenta.

Després d’una breu recuperació tèrmica amb màximes entre els 10-12 graus i mínimes lleugerament per sobre dels zero graus i que va durar fins el dia 17, els barcelonins van viure una de les onades de fred siberià més importants dels darrers segles. A l'interior de Catalunya, el fred no va afluixar degut a l'estancament de l'aire fred, circumstància que porta conseqüències a la industria catalana: "Las fábricas de la parta alta del Llobregat que no tienen motor de vapor han suspendido sus trabajos por haberse helado el agua que dá movimiento á los motores hidráulicos." LV. 18-01-1891.

En aquest ordre de coses, la segona advecció freda d'aquest mes arribava a Catalunya. Les cròniques periodístiques ens donen una idea de la fredorada: "Parece como que el clima de Barcelona se haya cansado de oírse apellidar suave y templado y quiera equiparse al que disfrutan las poblaciones de las regiones del Norte.
El frío de los días anteriores, continuó tan intenso ó más si cabe en el día de ayer, pese á los benéficos rayos solares que prestaron mientras lució, el mismo calor que una farola eléctrica.
La madrugada fue de las más crudas que de muchos años á esta parte se hayan experimentado en esta ciudad y la helada tan intensa que muy entrado el día aparecieron con caprichosos adornos de hielo los surtidores y fuentes de la ciudad.
Muchos eran los transeúntes que se detenían a contemplar los enormes carámbanos de hielo que cubrían cual blancos encajes los caballos marinos y geniecillos de la fuente de la Plaza de Palacio, la negra fuente de las tres gracias de la Plaza Real y los macizos de boj y flores que las rodean, cubiertos de una gran capa de escarcha.
El lago del Parque en su parte inmediata a las escaleras, debajo del puente, las tazas de los surtidores, los aljibes y lavaderos, los charcos al pie de ios árboles, todo estaba congelado.
El termómetro marcó temperaturas inverosímiles en esta ciudad. A las 11 de la mañana señalaba dos grados sobre cero, pero á las tres de la tarde bajó hasta cero continuando en este sitio con tendencia a bajar. En la madrugada había descendido hasta seis grados.
A todo esto soplaba un airecillo sutil, que por la tarde alcanzó honores de viento, que hizo en extremo incómoda la estancia en todos los sitios al aire libre, por lo cual las calles y paseos se vieron desiertos.
Al amanecer se cubrió el cielo de nubes, el viento calmó y a eso de las nueve cayeron algunos copos de nieve, continuando el tiempo con grandes indicios de próxima nevada.
Este descenso de temperatura ha de influir necesariamente en la salud, no ya de la gente enfermiza si qué aun de la sana y robusta. Las toses y resfriados abundan y de accidentes y muertes repentinas también se han dado casos."
LV. 19-01-1891.

Situació atmosfèrica el dia 18 de Gener de 1891. Podem veure com la isoterma de -15ºC a 850 hPa, fet molt poc freqüent, abraça tota Catalunya.

La situació a la resta de Espanya i Europa occidental no era gaire diferent. El fred i en alguns casos la neu era la noticia arreu: "Las noticias recibidas de provincias y del extranjero acusan también un gran descenso en la temperatura.
Las comunicaciones se hacen dificilísimas á causa da la nieve que obstruye vías férreas y carreteras.
En Madrid, como puede verse en la sección telegráfica, se ha desencadenado un gran huracán.
En los Pirineos han caido grandes nevadas, obstruyendo todos los pasos: los lobos salen de sus guaridas y se han presentado en los pueblos.
Continúa nevando en La Coruna en cantidad extraordinaria.
La nevada es general, no sólo en España sino en Europa, según las últimas noticias recibidas, habiendo alcanzado hasta poblaciones donde hace años no la habían visto, lo cual ya casi es un consuelo para nosotros.
El sábado nevó en Roma, en Nápoles, donde llegó á suspenderse la circulación, en Cannes, residencia de regios tísicos, en Mascou, en Genova.
En estas y otras poblaciones el termómetro ha descendido notablemente, llegando á señalar ocho grados bajo cero en Niza, catorce en Lión y en Madrid, y diez y seis en Sanmur, donde se ha helado el Seoiria en toda su profundidad. Hasta al Africa han alcanzado los fuertes fríos del invierno actual. Según telegramas de Argelia ha nevado en muchísimos puntos de aquel territorio, y algunas caravanas salidas de Hemccen han quedado bloqueadas por la nieve cerca de Sebdau.
Menos mal si sale cierto el refrán de: año de nieves año de bienes."
LV. 19-01-1891.

El dia 18 de Gener, apart d’enregistrar una minsa precipitació en forma de neu al voltant de les 9 del matí, es mesura la temperatura mínima més baixa registrada mai a Barcelona ciutat, des de 1780 que hi han observatoris meteorològics, amb -9,6ºC a la Plaça Universitat.El fred intens mereix un article apart a La Vanguardia del dia 20 de Gener:

LA TEMPERATURA
"El día de ayer, si bien frío en extremo, no lo fue tanto como su anterior, gracias á los rayos solares que amortiguaron con su benéfico calor la intensa helada que cayó de nuevo durante la noche.
Esto no obstante el agua con que los solícitos barrenderos de la ciudad inundaron calles, ramblas y paseos durante las primeras horas de ia mañana helóse acto continuo y en algunos puntos, como en las Rondas, subsistió el hielo pese al sol que brilló durante la mayor parte dal día.
A la caida de la tarde el sol que hacía un par de horas estaba cubierto por densos vapores amortiguó el calor de sus rayos refrescando acto seguido la temperatura y empezando una nueva helada casi igual á la de los días anteriores.
A esa hora visitamos de nuevo los sitios donde los efectos del intenso frío que reina se han dejado sentír con mayor intensidad.
Las charcas, barrizales y demás sitios de las vías públicas donde en mayor ó menor cantidad se había acumulado el agua, procedente del riego ó de desagues naturales continuaban heladas.
En el Parque y frente á todos los sitios designados como sitios notables para contemplar los efectos del frio había numerosa concurrencia de gente deseosa de contemplar los caprichosos dibujos y combinaciones que el hielo les había impreso.
En el Parque aparecía helada la cascada, de la que descendían enormes carámbanos de hielo en especial junto á los vertederos resguardados del sol: el lago de la misma en sus orillas, el riachuelo en toda su extensión y el gran lago en sus cuatro quintas partes tenían su superficie conjelada de un grosor tal, que las piedras y ladrillos qua arrojaban los curiosos —pese á la vigilancia de los guardias— no podían romperlo.
A las cinco de la tarde, la barquilla del Ayuntamiento, rompiendo con garfios de hierro el hielo que lo circundaba, atracó junto al islote del caimán y sacó al caimán que en él habita, hallándolo vivo y transportándole á sitio más resguardado de la temperatura glacial que reina.
En el espacio que dejó libre la helada se paseaban y zambullían y se agitaban y hacían mil correrías los patos, anades y demás aves acuáticas que en el Parque tienen alojamiento acompañadas de gran número de similares silvestres que en el mismo se han refugiado huyendo del frío de otros lugares. Entre ellas llamaban la atención unas aves llamadas pollas marinas de rico plumaje que también se han avecindado en aquel sitio de recreo.
Las fuentes y surtidores públicos continuaron con sus fantásticos adornos de hielo; si bien de menor duración. Las matas que rodean la fuente de la Plaza de Palacio, presentaban á la caída de la tarde, curiosísimo aspecto de blancas estalactitas que descendían hasta el suelo. Los caballos tritones, los leones y geniecillos de la misma ostentaban gruesos velos de hielo hasta la taza del pilón.
La fuente de Hércules inmediata al palacio de Bellas Artes tenía el aspecto de un gran monumento de hielo.
Los cocheros de tranvías y jardineras llevaban las manos resguardadas por enormes guantes de materia que variaban desde el algodón á la piel de cabra.
Durante la noche fueron muchas las calles donde serenos y vigilantes, deponiendo antiguos odios, departian agradablemente alrededor de hogueras mayores ó menores, en especial en el Ensanche donde la anchura de las calles hace más cruda la acción de la temperatura.
Y á todo esto los termómetros públicos riéndose del frío de la gente. Numeroso público consulta día y noche el termómetro de casa Dalmau en la Rambla y el del Parque y en ellos se encuentra con que señala temperaturas incompatibles con el frío que se siente, y de que esto no es exajeración baste decir que el último, el del Parque, señalaba á las cinco de la tarde de ayer á los curiosos que soplándose los dedos la consultaban, ocho grados sobro cero, cuando la helada escarcha de las cercanías indicaba un calórico muy inferior, debido quizás á estar entre cristales y no á la acción directa del ambiente esterior.
El agua que en las casas particulares tienen en depósitos al aire libre quedó en muchos de ellos helada como también las cañerías de conducción, las cuales estallaron con la presión é inundaron pisos y terrados.
Escusado es decir que en los Mercados las hortalizas aparecían cubiertas de escarcha y que en especial en el de la Boquería donde las vendedoras están poco menos que al aire libre, el pavimento era un enorme y gratuito skating-ring.
Las pobres avecillas que sientan sus reales en los paseos públicos de la capital, tienen para consolarse del frio que sienten la compañía de roquerols avies y otros que de otras regiones han venido á la ciudad.
Las plantas de jardines públicos y particulares han sentido también ios rigurosos efectos de la temperatura, pues son muchas las que han sido victimas de la crudeza de la misma.

Las comunicaciones están interrumpidas en Francia, Austria, Hungría, Italia y Alemania á consecuencia de la gran cantidad de nieve caída.
Están helados el Ebro, Bidasoa, la mayor parte de los secundarios del Norte de España, el Loire, el Marne, el Garona, el Sena y el Ródano en Francia.
El termómetro ha descendido á 14 grados bajo cero en Burdeos, Tolosa, Lión, Setif, Nimes, Moscou, Burgos, Valladolid, Segovia y otras capitales.
En Génova por primera vez desde 1854 se ha helado por completo el puerto.
Estas noticias casi le consuelan a uno del frio que se deja sentir en esta ciudad."

Pintura amb el titol "Embarcació a vela - Veler - El hivern de 1891 al costat del mar" del pintor holandés H. W. Mesdag que ens mostra una imatge marítima d'aquell cru hivern.

Cal recordar que va ser la darrera vegada que l’Ebre es va glaçar, malgrat això no es va glaçar a Tortosa de forma uniforme sinó que van baixar grans blocs de gel pel riu segons informacions i imatges: "Les vores del riu estaven gelades, amb un gruix de glaç de 5mm. Al mig del riu el corrent arrossegava unes masses de gel de 40 a 70 cm de diàmetre, que en arribar al pont de barques es deturaren, ajuntant-se i donant la impressió que el riu era tot glaçat d’una vora a l’altra. Alguns homes s’atreviren a travessar el riu per damunt del glaç. Com que aquella barrera estampia el pont, les autoritats, en previsió de que se l’emportes feren trencar el glaç, i els blocs que en resultaren arribaren sencers fins la Cava. Les vores de l’Ebre davant Amposta es desglaçaren entre les 9 i les 10 del matí." Assaig sobre el clima de l’Aldea, en el terme de Tortosa, de Josep Vía. 1931.

Sens dubte el fred tan intens però especialment continuat, va deixar imatges que 120 anys més tard encara no s’han tornat a repetir com aquesta del Ebre amb grans blocs de gel al seu pas per Tortosa.

Tots aquests freds van acabar de forma sobtada. El dia 21 ja no era tan fred i el sol brillava, donant lloc a un ambient molt agradable, especialment en comparació amb el dies passats, però durant la tarda el vent augmenta la seva intensitat fent-se violent i provocant danys en arbres, mobiliari urbà i deixant la ciutat a les fosques: "A medida qne fué anocheciendo aumentó en impetuosidad el viento hasta convertirse en huracanado á eso de las diez.
A esa hora una ráfaga impetuosísima, ciclónica, cruzó la capital con dirección al mar, tronchando las ramas de los árboles, haciendo crugir puertas y ventanas, volteando persianas y haciendo un lio de cuantos objetos ligeros halló á su paso.
De esta hora en adelante el huracán, que ya este nombre puede dársele, aumentó en violencia é impetuosidad.
Las ráfagas se sucedían unas á otras arrollándolo todo, las ramas de los árboles en los sitios públicos y jardines, volaban por doquier, las persianas que caían con estrépito, el chocar de puertas mal cerradas, el siniestro lamento que exhalában los alambres telefónicos pulsados cual enormes cuerdas de monstruosa arpa por los dedos informes del vendabal, unida á la semi oscuridad de las calles, pues los faroles públicos estaban apagados, hacían medrosa la noche."
LV. 22-01-1891.

La mestralada va ser imponent i el canvi de massa d'aire sobtat. El mes de Gener va acabar sense més història, tot i que potser ja n'hi havia prou.

El 2 de Febrer van caure quatre flocs sense agafar durant una posta de sol espectacular: "Al día húmedo, frío y con tendencia á nevar de anteayer, siguió uno magnífico y primaveral de los mejores que se disfrutan en esta ciudad durante el mes de mayo. Lució el sol sus galas fastuosamente, sin que ni una nube ni un celaje empañara en lo más mínimo el calor de sus rayos en la intensidad de su luz.
Por esta causa los paseos viéronse concurridísimos de gente á pie y á caballo, abundando los coches abiertos que no lucieron en la festividad anterior.
Aquello de que si llueve en la fiesta de la Candelaria recrudece el frío, no será este año, al menos por ayer.
Al oscurecer gozóse en la capital de una puesta de sol bellísima, espectáculo que la naturaleza hace muchos días que nos viene proporcionando con gran contentamiento de pintores y artistas.
La de anteayer, que tuvimos ocasión de presenciarla desde el cementerio nuevo, llamó la atención de todos los que en aquel triste, pero pintoresco sitio pudieron apreciarla por el derroche de color con que se presentó.
El cielo estaba cubierto de nubes que acababan de dejar caer numerosos copos de nieve que se desacían al tocar el suelo. Pero allá lejos del horizonte tras las montañas de San Pedro Mártir por un pequeño claro que las nubes dejaron mostróse el sol como un enorme globo de fuego, tiñendo de tonos de color de sangre, las nubes, las montañas y el paisaje.
Los rayos del sol poniente al atravesar la pequeña lluvia de copos de nieve que continuaban cayendo en el horizonte opuesto, reflejaba sobre las nubes de aquel lado un original arco iris en el que dominando la nota roja hacíale parecer como una lejana columna de fuego que surgía del mar.
Las siluetas de las montañas, de las masas de arbolado, de las de edificación destacábanse como recortes negros de aristas encendidas.
La niebla que se levantaba del mar al reflejar los mil tonos que por últimos rayos del sol iban imprimiendo á todos los objetos, quedó durante largo rato de un magnífico color nacarado.
El espectáculo duró largo rato: después fueron apagándose la intensidad de los colores, desapareció el arco iris, las sombras fueron enseñoreándose de la tierra y tan sólo allá lejos, aparecían algunas nubes de color de escarlata que iban amoratándose sensiblemente y haciéndose negras del todo.
Fue un espectáculo magnífico que, como hemos dicho, se repite cada día desde hace una semana."
LV. 04-02-1891.

Aquest mes de Febrer van haver alguns dies freds la primera quinzena, es va arribar a -1,5ºC el dia 10, però la resta de Febrer va ser agradable.

El mes de Març va ser una mica més fred respecte a la mitjana climàtica de finals del segle XIX amb alguns dies primaverals alternant amb dies freds que fins i tot van deixar algunes nevades testimonials. Ja començada la primavera astronòmica, el 23 de Març, cau una nevadeta a primera hora que no agafa a la ciutat: "La temperatura continuó en descenso durante el dís de ayer, en el que volvieron á hacer su aparición abrigos que se creian relegados al reposo.
Amaneció cubierto empezando á eso de las ocho una lluvia finísima de copos de nieve que se derretían al contacto del pavimento. Durante el día continuaron los nubarrones velando el sol y tan sólo al anochecer se despejó algo la atmósfera para volver á cubrirse casi por completo de grandes y compactas nubes.
La nevada se ha extendido de la alta montaña de Cataluña á varias poblaciones del llano: el frío es general."
LV. 24-03-1891.


Entràvem a la Setmana Santa que mostraria la seva variabilitat, com podem veure ja passava fa més de un segle,doncs fins i tot la neu va aparèixer en una data tant avançada com el 28 de Març: "Por la mañana, que se presentó algo fresca, cayeron ligerisimos copos de nieve que no llegaron á formar colección digna de mentarse." LV. 29-03-1891.

I va malmetre les celebracions de la Pasqua de Resurrecció on les actuacions de les caramelles van acabar de forma sobtada: "Continuó ayer el día cubierto y frío, y por tanto triste en extremo. Podrá creerse que la naturaleza se ha retrasado este año en la organización de la mise en scene, dando colores alegres y tonos de primavera á las festividades del jueves y viernes santo y decorando con colores fúnebres, y matices pálidos y cenicientos la Pascua de Resurrección.
La poética tradición de las caramellas, como adelantamos ayer, se resintió de las humoradas de marzo, viéndose las alegres comitivas sorprendidas á mitad de sus paseos con una lluvia con horrores de chaparrón que duró hasta las dos de la madrugada.
La lluvia, por de contado, disolvió á coristas y curiosos: algunos se refugiaron en los cafés, otros en los pórticos de la plaza Real y la mayoría se disolvieron molestos y malhumorados.
Al cesar la lluvia, los que habían tenido paciencia para esperar, reanudaron sus excursiones resonando hasta el alba por distintos ángulos de la ciudad los alegres sones de las caramellas.
La mañana, como hemos dicho, se presentó húmeda y nublada, con gran desesperación de los fondistas de las afueras que hacen su agosto en estas festividades, pues amenazaba lluvia a cada instante.
Los aficionados á toros temieron también por su fiesta favorita, pues circularon rumores de que se suspendería la corrida por el mal estado del piso de la Plaza.
Afortunadamente para todos, el horizonte empezó á despejarse, el sol á media tarde se dejó ver aunque algo velado por ligeros vapores, que se despejaron por completo al anochecer haciendo presagiar para hoy un buen día de Pascuas. Así sea."
LV. 30-03-1891.

Així acaba aquest hivern, un dels més freds del segle XIX, amb onades de fred històriques, que també es presentaren fora de la temporada estricta de fred i que allargà l'ambient hivernal durant gairebé cinc mesos.



Les imatges de Barcelona que apareixen en aquest tema pertanyen al exemplar de La Il·lustració Catalana aparegut el 31 d'octubre de 1890 i que lloava la figura del recentment desaparegut alcalde de la ciutat, Sr. Rius i Taulet.

dimarts, 16 d’agost del 2011

Desembre de 1844. ... tempestes i inundacions (II)

Com ja hem vist a la primera part d'aquest tema, una onada de fred amb força neu, que va arribar quan encara era la tardor astronòmica, s'esvaïa a mitjans de mes de Desembre. La temperatura ja pujava i la gent es preparava per les festes: "Si el tiempo mejorara las próximas ferias serían muy animadas y concurridas." DB. 19-12-1844. p. 5128. però no va millorar, ans al contrari.

El dia 20 de Desembre després d’uns dies de pluja, cap a les 2 de la tarda, el cel es cobreix amb núvols molt negres que obliga a encendre llums artificials com si de nit es tractés. La tempesta va ser important. Llamps, trons, calamarsa, vent i pluja molt intensa van ser els ingredients d’una tarda fatídica: "Ayer á las dos de la tarde encapotóse el cielo de negras y opacas nubes; y una oscuridad tal, que en muchas casas se vieron obligados á hacer uso de luces artificiales, hacía presagiar una horrorosa tempestad. Media hora después empezó una furiosa lluvia mezclada de granizo que duró algunas horas, y mientras tanto no cesó un momento el estallido del trueno, y los rayos se cruzaban en todas direcciones, cosa rarísima en la presente estación. No dudamos que algunos rayos caerían dentro de la ciudad y que el aguacero, tan fuerte cual nunca lo hayamos visto, habrá causado daños de consideración y tal vez caudalosas avenidas en el Llobregat y el Besòs".

La Rambla, en un gravat de Nicolas Chapuy de 1844, on veiem el Liceu a l'esquerra i el passeig amb el terra sense pavimentar. No és difícil imaginar que baixaria ben plena, possiblement com alguna de les rieres del Maresme en temps recents.

Unes línies després emplaça als lectors per conèixer les conseqüències, doncs tot pinta dificil: "Hoy iremos sabiendo los pormenores del terrible aguacero de ayer tarde. Creemos que ha hecho estragos en las inmediaciones del torrente del Olla. Una grande avenida del Rech Condal se llevaba como si fuesen débiles pajas los sacos y varios efectos de los molinos y casas inmediatas. En el matadero de la Esplanada tuvieron que cesar los trabajos por hallarse inundados de agua. Las cloacas no podían contener el agua que corría á torrentes por las calles, lo propio que los conductos interiores de muchas casas que reventaron por varias partes.
Anoche las inmediaciones del salón de la Patacada estaban convertidas en un gran estanque. En varias tiendas de aquellos alrededores, el agua llegaba á sus habitantes hasta la cintura. La guardia Civil tuvo que hacer esfuerzos inesplicables para salvar á una familia. En muchas habitaciones tuvieron transtornos de la mayor consideración."


El periodista demana disculpes per que no donen a l’abast en la quantitat de noticies de desgràcies: "Conforme iba adelantando la noche llegaban á nuestros oídos más tristes y funestas nuevas. La riera den Malla se salió de madre, inundando los alrededores de Barcelona y las fértiles huertas de San Beltrán. Las avenidas de sus aguas envolvieron á un grandísimo número de personas que iban á sus ocupaciones, ó venían para la feria. Desde las murallas se oían sus gritos pidiendo misericordia. Poco después de anochecido salió la Guardia Civil con objeto de darles algún ausilio. El Gefe político salió también a las siete de la noche, hora en que permanecían aun abiertas todas las puertas, para dictar presencialmente las disposiciones que requería la urgencia del caso, le acompañaban con hachones varios agentes de seguridad. Se nos ha dicho que la autoridad municipal acudió con la velocidad del rayo al punto de mayor peligro. El agua según hemos oído referir arrojaba por la parte de Santa Madrona, varios animales de tiro, tocinos, carneros y hasta algunos muebles y diferentes efectos, y las disposiciones de dichas autoridades sacaron del apuro á tres hombres que tuvieron que encaramarse á los árboles para salvar su existencia que au nasi temian perder. La víspera de uno de los dias mas festivos de Barcelona, ha sido de luto y consternación general.
Donde el agua ha hecho estragos, ha sido en las calles inmediatas á la acequia del Rech Condal que ha reventado por dos partes. En varios de los mesones situados en aquella parte de la ciudad, han tenido que sacar los animales que ahogaban en los establos"
DB. 21-12-1844. p. 5152 i 5153.

Barcelona vista des del paratge de Vista Alegre a Montjuïc. Nicolas Chapuy, 1844. Al gravat podem veure, entre Montjuïc i la ciutat, la platja de Sant Bertran que va desaparèixer el 1880 per l'ampliació del port.

El dia següent el recompte de danys segueix: "Los vecinos de las huertas de San Beltran han sufrido daños de mucha cuenta. (Nota: Les hortes de Sant Bertran estaven en el que avui seria el Poble Sec) Casi anegados en agua, hacían todos los esfuerzos inimaginables para salvar sus mas preciosos efectos, mientras sus mugeres y niños se refugiaban dentro de la ciudad. El agua que pasaba por el foso llegaba casi á cubrir el puente de la puerta de Santa Madrona. Las primeras puertas de los baños de la Casa de Caridad y el camino que á ellos conducía, desapareció al impulso de una impetuosa corriente que se abrió paso por aquella parte, arrastrando una buena porción de terreno.
La acequia Condal reventó, segun tenemos entendido, por la parte del molino de la sal. Los vecinos de las calles del Rech, Tantarantana, Vidriería y todas las que les son contiguas han sufrido perjuicios incalculables. Es inutil decir que todos los sótanos ó depósitos subterráneos de las casas se llenaron de agua, cuando estaban inundados todos los almacenes hasta la altura de dos y mas palmos. En dicha parte de la ciudad es donde el comercio tiene grandes acopios y hay casa que ha sentido una pérdida de muchos miles de duros. Las pacas de algodon, sacos de arroz, harinas, drogas, etc, cajas de azucar, sales y aceites,los fardos de diversos géneros han sufrido notable avería, y los que eran capaces de disolución han desaparecido del todo ó quedado inservibles.
El conducto de una de las minas que conducen el agua á esta ciudad reventó en la parte de casa Ragás en el término de Gracia.
La riera que pasa por el término de San Gervasio ha destruido con su impetuosa corriente fuertes paredones de las casas de recreo que lindan con ella, y el agua ha hecho desaparecer los escombros.
Unos jornaleros á nado ó con el agua hasta la garganta cerca de la puerta de San Antonio salvaron á un hombre y á una muger que estaba en cinta.
Por la tarde de ayer llegaron muchos payeses con sus correspondientes provisiones y el tiempo empezaba á mejorar. Hemos oido referirque los que venian de la parte del Besós no pudieron vadear el rio y permanecian en la orilla opuesta cerca de San Adria con su ejército de galli-pavos que probablemente han entrado esta mañana.
Se desplomó con grande estruendo todo el lienzo esterior de la muralla de tierra que por la parte de la Ciudadela hacia mucho tiempo que estaba amenazando ruina.
Hemos oido decir que en Sans y en otros pueblos vecinos se vendian á dos pesetas muchos pavos que se han encontrado ahogados en diferentes puntos. Un rayo cayó en la montaña de Monjuich y un centella en la calle de Lancaster ó en sus inmediaciones.
Sentimos no estarmas enterados de los desastres que seguramente habrá causado el temporal fuera de Barcelona, pues han llegado poquísimos ó ninguno de los carruages que vienen diariamente: sin embargo, podemos asegurar que es muy general, y anda muy vàlida la voz de que este solamente ha estendido sus estragos hasta la otra parte de los rios Llobregat y Besós. Mas lejos no han esperimentado sus rigores los diferentes pueblos de la provincia, pero si se dice que ha caido sobre ellos otra copiosa nevada. Quiera el cielo que esto sea cierto y que no tengamos que lamentar nuevos males."
DB. 22-12-1844. p. 5168 y p. 5169.

Carta escrita a Barcelona i publicada al diari L'ami de la religion et du Roi el dia 1 de Gener de 1845 sobre les conseqüències de la tempesta.

Durant els dies següents van apareixer alguns cadavers surant al port o a les platges i també van haver enfonsaments de construccions en mal estat. Hom pot imaginar l'espectacle dantesc que oferia la ciutat dies abans de les celebracions nadalenques, festes que de ben segur molts no van poder gaudir perquè ho havien perdut tot o quasi be tot.

Però al mal temps, bona cara, i diumenge dia 22, dos dies més tard de la tragèdia, la fira de Nadal era en marxa i calia injectar optimisme: "Ayer á eso de media mañana empezó á serenar el tiempo, y las tiendas de las calles de Boquería, Call, bajada de la Carcel, Platería, etc, empezaron á hacer ostentación de los mas ricos y preciosos géneros que en ellas se encierran...." DB. 23-12-1844. p. 5181.

Com és de suposar, la neu, el posterior desgel i les pluges i tempestes posteriors van deixar molt malmesos els carrers, camins i vies principals per on circulaven persones, cavalleries i carros entre els pobles i viles del Pla de Barcelona. Fins la primavera següent no es van arranjar molts d’aquests carrers i vies com el mateix Passeig de Gracia.

Taula amb les dades meteorològiques de Barcelona de la segona quinzena del mes de Desembre de 1844. A la primera columna el dia corresponent, les dues següents són la temperatura en ºC i les condicions a les 7 del matí, després el mateix a les 2 de la tarda i a les 10 de la nit.

dimecres, 10 d’agost del 2011

Desembre de 1844. Fred, neu... (I)

Després d'una dècada de revoltes, les Bullangues van ser avalots que lluitaven contra el poder polític i contra una societat molt desequilibrada econòmicament, van començar el 1833 amb la mort de Ferran VII amb revoltes populars, crema de convents i enfrontaments entre els bàndols polítics per unes reformes que costaven d'arribar.


Els darrers episodis d'aquestes revoltes van ser el bombardeig de Barcelona per part del general Espartero el mes de Desembre de 1842, del qual veiem un gravat en la imatge de dalt, i la revolta de la Jamància durant el 1843, de la qual veiem una imatge tot seguit.


L'any 1844 va arribar la tranquil·litat social amb uns governs moderats i la conquesta d'algunes de les reivindicacions. Una d'aquestes va ser l'aprovació per part de l'ajuntament de l'enderrocament de les muralles de Barcelona, que no es faria efectiu fins 1854.

Barcelona tenia una densitat de població molt alta, hi vivien uns 200.000 habitants al perímetre que avui coneixem per Ciutat Vella, entre el Paral·lel i la Ciutadella, amb carrers estrets i sense pavimentar en la majoria de casos, condicions higièniques i de seguretat molt precàries, tot això encotillat per unes muralles que ofegaven els barcelonins i que feien que qualsevol manifestació violenta de la natura desfermés una allau de conseqüències importants. El mes de Desembre de 1844 va posar a proba la integritat de Barcelona.

Dos episodis meteorològics, un de nevades i un altre de pluges intenses, van marcar aquest mes de Desembre del 1844 com un dels més catastròfics, meteorològicament parlant, a la ciutat de Barcelona a mitjans del segle XIX.

La muralla de mar, en un gravat de 1845, va ser la última en enderrocar-se.

Després d’un Novembre suau, Desembre comença una mica fresc però no és fins la matinada del 3 al 4 de Desembre que les temperatures cauen en picat i es posa a nevar fins el migdia. No agafa a la ciutat però si a les muntanyes del litoral, fet que dos dies més tard fa comentar a un periodista del Diari de Barcelona, sens dubte aficionat a la caça, que "la nieve que cayó anteayer ha hecho que se cogiese bastante caza por la parte de la montaña" DB. 06-12-1844.

El fred es manté, com podem veure a la taula meteorològica, malgrat els dies assolellats o amb alguns núvols. El dia 8 la temperatura és baixa durant el dia i plou a Barcelona però neva a les muntanyes veïnes sense agafar al terra. Neva també a pobles de la costa de llevant i de la vall del Llobregat. Arriben noticies d’una gran nevada a Vic. La onada de fred segueix sent la protagonista i el 11 de Desembre cau la que serà la gran nevada d'aquest hivern. La precipitació és, aquest cop, en forma de neu a tot arreu, neu que cau intensament sobre la ciutat entre les 8 del matí i la 1 del migdia, hora en que para i fins i tot surt el sol. Al dia següent el Diari de Barcelona escriu: "Este invierno se presenta tan riguroso, que nos recuerda los intensos fríos que se esperimentaron en el año 1830. Ayer desde las ocho de la mañana hasta la una de la tarde cayeron copiosos copos de nieve, de una manera tal que rara vez sucede en Barcelona. A dicha hora serenó el cielo, però toda la ciudad y sus alrededores estaban cubiertos de nieve de tal modo que observamos diversas avecillas que volateaban incesantemente, sin encontrar un lugar de refugio y que más tarde caían amortecidas sobre el hielo y eran cogidas por los muchachos....". DB. 12-12-1844. p. 5037.

S’informa de que el fred ha fet mal als camps i es perdrà una bona part de les collites. Els gruixos a les comarques de l'interior es mesuren entre dos o més pams de neu. Una setmana després de l'arribada de l'advecció freda amb neu a cotes baixes, cau la gran nevada que agafa fins la mateixa platja.

Novament el 13 de Desembre i amb una temperatura un pel més alta, surt el sol de bon matí però es cobreix a mig matí i cau una pluja fina a la ciutat i neva a Collserola. No és una gran nevada però ja comença a preocupar, de manera que al dia següent un periodista ens mostra les seves inquietuds sobre si el clima canvia o no i ens fa una descripció del que actualment coneixem com a fenomen de l’illa de Calor Urbana però que llavors encara no s'havia estudiat: "El invierno ha desarrollado este año todos sus rigores de una manera tal, que parece que haya variado el clima de Barcelona. El frío que se hace sentir de una manera muy intensa, y que tiene el termómetro en una temperatura muy baja, es mucho mayor fuera de los muros de la ciudad y en los puntos inmediatos á la montaña. Un sol hermoso y despejado no fue bastante para deshelar con el influjo reparador de sus rayos, la copiosa nevada que cubría cuantos objetos se presentaban á nuestra vista. Ayer, el día amaneció sereno y brillante, pero á media mañana encapotóse el cielo, una densa niebla oscurecía la atmósfera, y el triste blanquecino de opacas nubes y una ligera y menuda lluvia hacía pronosticar otra nevada tal vez más fuerte que la primera. Escusado es referir que en estos tristes días, en que las personas que disfrutan de regulares comodidades apenas pueden procurarse los medios suficientes para preservarse del rigor de la estación, los habitantes del campo y los empleados en varios oficios que tienen que trabajar al raso sujetos á la intemperie, se ven privados de dedicarse á sus ordinarias faenas y de procurarse su subsistencia." DB. 14-12-1844. p. 5063. I fa esment al repartiment d'almoines per part de les autoritats de l’ajuntament i del cura de la Barceloneta als veïns pobres d'aquest barri costaner.

Temperatures en graus centígrads i estat del cel de la primera quinzena de 1844, publicades diàriament al Diari de Barcelona.

La persistència de la pluja i la neu fa exclamar: "Las calles de esta ciudad están convertidas en un lodazal, y de casi todo punto intransitables..." DB. 16-12-1844. p. 5087. Un parell de dies més tard, sembla que hi ha resposta a les crítiques: "Por fin los alcaldes constitucionales se ocuparon en la tarde del lunes del lastimoso estado en que se hallaban las calles de Barcelona, merced al poco celo con que cuidan de hacer cunplir los repetidos bandos sobre limpieza y salubridad pública, las personas encargadas de vigilar sobre su más exacta observancia. Ayer mañana todos los vecinos limpiaban y barrían con el mayor afán, el frente de sus respectivas habitaciones, y al paso que en algunas calles practicaban esta operación con desidioso cuidado y lo dejaban á poca diferencia tan sucio y asqueroso como antes, en la mayor parte de las casas lavaban el empedrado con la más escrupulosa detención y lo dejaban perfectamente limpio." DB. 18-12-1844.

L'article segueix felicitant als alcaldes per la iniciativa i suggereix mesures preventives per evitar noves situacions com aquesta, si fa o no fa com encara avui, 167 anys després, seguim demanant. La tranquil·litat tornava però pocs dies els va durar, de fet, el malson no feia més que començar.

dimarts, 2 d’agost del 2011

La calorada de Juliol de 1.982

Acabem de passar un mes de Juliol atípic a moltes comarques catalanes pel que fa a precipitacions i ambient fresquet pel que els darrers estius ens tenien acostumats. Aquesta anomalia ni és general ni obeeix a circumstàncies que no tinguin un caire meteorològic: l'anticicló ben situat a les Açores permetia un flux constant de vents d'origen nord-atlàntic i l'arribada de línies d'inestabilitat ha donat lloc a un mes de Juliol atapeït de tempestes, especialment a la meitat est i nord de Catalunya.

L'altre cara estiuenca la trobem l'any 1.982, l'any dels Mundials del Naranjito, Espanya 82, quan la calor tòrrida, amb rècords inclosos, va ser la nota destacable.

Després d'un mes de Juny amb poques calorades a Barcelona, només un dia per sobre dels 30ºC a l'observatori Fabra, però que va preparar els ingredients pel Juliol. L'anticicló a les Açores, una depressió a l'Atlàntic nord que formava un solc en alçada i un matalàs de calor important sobre el Magrib són els actors principals en aquesta onada de calor.

Anàlisi de la situació atmosfèrica el dia 2 de Juliol de 1982

La dinàmica dels centres d'acció va evolucionar de manera que el solc va transformar-se en un depressió aïllada en nivell alts (DANA) sobre Madeira amb un flux de vents del sud sobre Marroc que impulsarà la bombolla càlida cap al nord i cap a l'est, és a dir cap a la Mediterrània occidental, com podem veure en el següent anàlisi.

Anàlisi de la situació atmosfèrica el dia 6 de Juliol de 1982

Una primavera extremadament seca, entre Abril, Maig i Juny van caure només 39 mm, va deixar els boscos completament eixuts, factor decisiu en el desenvolupament dels incendis, la majoria provocats, de primers de Juliol. La Vanguardia encapçalava el seu article principal amb aquest paràgraf: "Gran parte de los bosques de la provincia de Barcelona estallaron ayer en llamas. Como si un negro cerebro dirigiera las operaciones, los incendios forestales se sucedieron uno tras otro con inusitada rapidez y en múltiples lugares: Garraf, Martorell, Sant Quírze de Safaja, Parets, Cardedeu, Castellterçol, Caldes de Montbui, El Figaró, Aiguafreda... los bosques parecían haber declarado la guerra. El más espectacular y peligroso de todos los incendios fue el originado en el macizo de Garraf en el término municipal de Beques, que llegó a quemar varias torres y óbligó a desalojar a dos mil personas en la zona de Castelldefels." LV. 07-07-1982.

Tot seguit, el mapa publicat en el mateix article amb els focs actius al voltant de Barcelona.


La meteorologia i el factor humà van ser crucials per a que les temperatures atenyessin valors rècord, molts d'ells encara vigents, i que és noticia de portada a La Vanguardia junt a les reaccions a un Brasil-Itàlia del Mundial, jugat a l'estadi de Sarrià sota una temperatura superior als 37ºC.


Les altíssimes temperatures van afectar de forma més clara a la part interior de Barcelona, Collserola i Prelitoral. Al Fabra la màxima va ser de 39,8ºC, rècord absolut de tota la sèrie de quasi 100 anys, i no només això sinó que la mínima de la nit següent no va baixar dels 30ºC en molts barris de Barcelona i l'ambient era molt tòrrid. Al Vallès les màximes van ultrapassar els 40ºC, en canvi, a l'aeroport la marinada d'una Mediterrània encara no gaire càlida va impedir unes màximes molt elevades. Tot seguit un quadre amb les màximes i mínimes a l'observatori Fabra, al Putxet i a l'aeroport, tots ells observatoris oficials:


En l'anàlisi de la situació que fa La Vanguardia, cal observar com el periodista deia el què passava i el que li havien explicat perquè passava, evitant sensacionalismes com avui en dia que relacionen amb l'escalfament global qualsevol onada de calor: "La actual ola de calor tiene su origen en los calientes vientos que llegan a Cataluña y gran parte de España procedentes del Africa y más concretamente del Sahara. Estas altas temperaturas «circulan» a media y alta altura. Simultáneamente a este factor, se registra lo que los técnicos en Meteorología denominan «inversión térmica»; en las capas más altas de la atmósfera existe la misma temperatura que a ras de suelo e, incluso, algunos grados por encima.
Un tercer elemento se une a los dos anteriores: pese a que los vientos están en calma, cuando soplan lo hacen en dirección Castelldefels - Barcelona" LV. 07-07-1982.

Queda molt clar, una invasió d'aire saharià unit a la presència propera de focs i a vents fluixos del SW que porten l'aire reescalfat, van ser les causes de la onada de calor més forta que Barcelona i les comarques properes han patit al segle XX. El Mundial de Futbol de Espanya 82 sempre serà recordat per la forta calor.